miércoles, 29 de abril de 2020

RENAIXEM. Documental. La huerta Valencia y los que la trabajan y XAVI SARRIÀ - Renaixem (2017). Canción.



Cada tarde, de forma puntual, salimos a las 20 horas a nuestras ventanas y balcones a aplaudir al personal sanitario en señal de agradecimiento ante la crisis sanitaria de la Covid-19. Un reconocimiento que se ha ido haciendo extensivo a otras personas que trabajan en las actividades denominadas “esenciales” y que permiten que nuestra vida en confinamiento sea, dentro de lo que cabe, mucho más cómoda: trabajadores de los supermercados, transportistas, personal de limpieza. ¿Y qué pasa con el sector primario? ¿Quién se acuerda de agricultoras, pescadores, pastoras?


Y por ultimo os dejo esta canción, dejando la parte política del mismo, esta canción os emocionara. Todo aquel que resida en Valencia entenderá todas las razones por la cual  os invito a que escuchéisResistiré sigue en muchos balcones de nuestro país sonando, pero después de escuchar esta canción me he emocionado y supongo que muchos de vosotros/as os emocionara. Escucharla todas las mañanas nada mas levantarnos que es un gran antídoto para todo.

Renaixem amb tu,
y amb tu REXISTEREM



Renacemos

de las luces del amanecer

el sol que NOS guía cada día
el instinto de las fieras feroces
el vuelo de los pájaros
los olas bravas

Renacemos
de Creer en nosotros
de las raíces que sostienen a los árboles
la leyenda de una resistencia
que nunca vencerán

renacemos
de la antigua sabiduría
de las manos que trabajan la siembra

renacemos
del tu Calida sonrisa
de la audacia de sentirnos libres

hijos del agua, la tierra y el fuego

Renacemos contigo
y contigo venceremos

renacemos
de las tardes rojas
A Calles de nuestra infancia
la alegría humilde a las caras
la emoción cantada
con la voz rota

renacemos
de las hazañas del pueblo
celebradas con llantos y abrazos
la belleza de vivir la vida
sin claudicar

renacemos
de Todas las Heridas
escritas a las Pieles mestizas

renacemos
de la perseverancia
de luchar con la antigua esperanza

hijos del agua, la tierra y el fuego

Renacemos contigo
y contigo venceremos


renacemos
del cielo cubierto de estrellas
la luna gris entre los ramas
el viento que agita los miedos
la llamada salvaje
el rumor del bosque

renacemos
de nuestros orígenes
los palabras que mantenemos vivos
a los versos que expliquen la historia
de 1 antiguo legado

renacemos
de las guerras que es entregan
en los valles oscuras de Nuestros viñedos

renacemos
de Todas las cornadas
si Hemos Caído NOS alzaremos mil veces

hijos del agua, la tierra y el fuego

Renacemos contigo
y contigo venceremos
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viernes, 24 de abril de 2020

Sí naciste entre 1950 y 1989.



A LOS NACIDOS ENTRE 1970 Y 1987

Somos una generación especial y nos denominaron la generación X y como no si nuestra infancia estuvo llena de cambios

Somos la última generación que jugaba en la calle y en los recreos del colegio a las bolitas, a el escondite, somos la primera generación que jugó con videojuegos, fuimos a parques de atracciones y vimos caricaturas a color.
Fuimos los últimos en grabar canciones de la radio en casettes  y vimos películas en versión Beta y VHS pero orgullosos pioneros del personal stereo y los CD's.

Cuantos no tuvimos que tragarnos, Salvado por la Campana (con todo y Screech), Beverly Hills .
Nosotros vimos la caída de torres gemelas y también vimos caer el muro de Berlín.
Aprendimos a utilizar los ordenadores antes que nuestros padres y abuelos, y sobre todo antes de todos esos niñossuperdotados de hoy en día y nunca vimos a los que no sabían usar los ordenadores como una especie de "retardados" como sucede hoy.

Jugamos con el Double Dragon, Strett Fighter, empezamos el Mortal Kombat, el tetris, el Mario Bross, nos pegábamos a la tele a mirar Hugo y como otros jugaban desde sus casas usando el teléfono de red fija!! vimos los anuncios de los primeros moviles (como ladrillos) y creímos que Internet sería un mundo libre.
Somos la Generación de Xuxa, Robotech, Gi Joe, Los Halcones Galácticos, los ThunderCats, los Transformers, He-Man y las Tortugas Ninja, Del Correcaminos, Los Supercampeones, Espartaco, Mazinger, de los Pitufos, La Pantera Rosa, Los Picapiedras, El pájaro loco, Candi Candi, Remi y Marco.
Los que crecieron escuchando a Madonna, Michael Jackson y Guns N'Roses, New Kids on the block, Por supuesto en ver y vivir los primeros VIDEOS MUSICALES , Los Locomía y sus abanicos.
La última generación de las botellas de litro de Coca-Cola familiar cuando un litro alcanzaba para toda la familia!!

Y los últimos en ser mandados a comprar en la bolsa de cuadritos. 
Mirando atrás es difícil creer que estemos vivos: viajábamos en autos sin cinturones de seguridad traseros, sin sillitas especiales y sin air-bag, hacíamos viajes de 10-12h y no sufríamos el síndrome de la clase turista. No tuvimos puertas con protecciones, armarios o frascos de medicinas con tapa a prueba de niños.
Andábamos en bicicleta o patines sin casco, ni protectores para rodillas y
codos. Los columpios eran de metal y madera y con esquinas en punta oxidada .

No había moviles!!!!. Íbamos a clase cargados de libros y cuadernos, todo metido en una mochila o bolsón que rara vez tenía refuerzo para los hombros y mucho menos, ruedas!! Cuantos no recogimos del suelo nuestros cosas al romperse la mochila! Y el que tenia un pantalón marca Wrangler.

No tuvimos PlayStation, no había 99 canales de televisión, pantallas planas, sonido surround, mp3s, ipods, ordenadores e Internet, pero nos lo pasábamos de lo lindo tirándonos globos con agua, o jugando con los playmobil. Y nunca escuchamos sobre el calentamiento global.

No era necesario tener fotoblog, Hi5 o MySpaceFacebook, twitter, para saber si existíamos, bastaba con hacer bien fuerte la "silvada" del grupo o gritar fuera de la casa, en plena calle, para que toda la cuadra saliera de sus casas.

Éramos el zanahoria, la china, la flaca, la pecosa, el negro, el chato o cosas así, pero todos pertenecíamos al mismo grupo y por el apodo sabíamos de inmediato quien era (ahora serian zanahoriitax, shiina, flahkah, p'kosiita, neghhro y shatto). 
Éramos responsables de nuestras acciones y acarreábamos con las
consecuencias, no había nadie para resolver eso. Tuvimos libertad, fracaso, éxito y responsabilidad, y aprendimos a crecer con todo ello.

! Los que estamos sobreviviendo al coronavirus somos afortunados, ahora si tienes hijos, recuerdales como eramos cuando teníamos su edad, recordemos
lo bueno de la vida. Lo fácil que es ser felices, la grandeza de lo sencillo.
No necesitamos todas esas etiquetas, todas esas superficialidades, cosas,
moviles, ropa... recordemos cómo ser niños, pero sobre todo, cómo ser libres!!


aaaaaaaaaaaaaaaaa

jueves, 23 de abril de 2020

El pastor, Aristoteles y el coronavirus.



Segun Aristoteles habla de varios tipos de democracia que se basan radicalmente en tres principios básicos:

1. Los ciudadanos deben pensar poco.

2. Reinar la desconfianza de unos con otros.

3. Imposibilitar la acción ciudadana.

El gobernante necesita de la ignorancia del pueblo ya que, son los pensante,s los críticos, los que reflexionan, truncar a los sobresalientes y egoístas ( aquellos que alimentan su individualidad, sueños e intereses), la educación como medio e intereses general. Las capacidades y virtudes, consideradas como elementos para que los ciudadanos adquieran confianza en si mismo son mutiladas mediante la degradación de la cultura.

El levantamiento de calumnias para generar discordia, , la amistad queda también mal vista, espiando que anulen cualquier reunión o asociación entre ciudadanos dificultando la conspiración

La generación de condiciones empobrecedoras y extenuantes que gasten energías no para planificar sino en sobrevivir.

Solo se derrotara con el ciudadano pensante, con fe en si mismo y con fuerza, porque al final los gobiernos no velaran por el bien común, ni verán a sus conciudadanos como iguales ante la ley, mas por el contrario, no escuchara las demandas ciudadanas.

Aristoteles y la politica se puede interpretar de muchas formas dependiendo de cada persona.

En fin, Aristoteles cuenta como un tirano visita a otro, ansioso de saber como controla a sus súbditos tan eficazmente. El le dirige a la puerta de la terraza y mostrandole el campo de trigo, saco su espada y corto las espigas que sobresalían. No hizo falta mas explicación.

Este pastor francés explica como funciona los rebaños y os puedo asegurar que Asristoteles no habría dado una explicación mejor sobre el coronavirus y las ideologías.



domingo, 19 de abril de 2020

La paradoja generacional del CORONAVIRUS. Una importante lección. HOPE.






Seremos capaces cuando todo pase de luchar por la supervivencia de nuestros hijos. Yo no quiero volver a la normalidad, luchare por mis hijos, pero también por los TUYOS.



sábado, 18 de abril de 2020

No quiero volver a la normalidad. Diario.es



Me gustaría que leáis un articulo y 1 vídeo final, quien quiera y con atención. Las personas que piensen que después de esto podremos volver a la normalidad han de abrir los ojos, porque esta pandemia es una oportunidad sin precedentes para nuestros hijos y su futuro. Después de esto habrá que actuar  de verdad, o su futuro estará seriamente comprometido. No se trata de ser catastróficas, pero si realistas. Los grupos tenemos la capacidad de cambiar las cosas. No tiene desperdicio.


Pues yo, lo siento, pero no quiero volver a la "normalidad". No anhelo volver a las caravanas diarias para ir al trabajo, a pasar menos tiempo con mi familia, ni a ver la "boina" negra amenazando el cielo de Madrid, a una educación segregadora y con ratios insostenibles, a la precariedad de la Sanidad, al elitismo de que gane más el que más dinero sea capaz de producir menospreciando labores tan fundamentales en este crisis como las de limpiar, reponer o entregar productos, cuidar a los mayores... Detestaría regresar a la orgía de consumismo compulsivo y sin sentido que nos hacía comprar productos innecesarios y de mala calidad, fabricados en países pobres por personas pobres en condiciones de semiesclavitud, para que otros puedan seguir acumulando sus riquezas, sólo por el hecho de que esas prendas son baratas y de temporada.
Tampoco quiero recuperar esa proximidad ficticia que nos hacía llamar de vez en cuando y casi rutinariamente a nuestros familiares más cercanos, sin importarnos realmente por sus vidas; ni a cruzarme de nuevo con los vecinos en el ascensor sin mirarnos a los ojos y sonreírnos, conscientes de que la vida nos pasa a todos. Ni a seguir viviendo ajeno al resto del mundo, encapsulado en mi "privilegiado" modo de vida. Ni a continuar viendo a los inmigrantes con miedo, como enemigos a los que hay que cerrar el paso con concertinas o muros. No, no quiero volver a la normalidad de la que todo el mundo habla.
No deseo seguir mirando para otro lado y fingir que no pasa nada, que estamos bien, que todo va a salir bien. No quiero resignarme a aceptar que todo se arregla con una vacuna o con una aplicación de geolocalización en el móvil que controle todos nuestros pasos. No quiero seguir escuchando excusas para no hablar de lo importante. No puedo tolerar que haya quienes, por sus propios intereses, mantengan el discurso del negacionismo, pero pretendan mantener las políticas del darwinismo social que están provocando más pérdidas humanas. Volver a esa normalidad en la que se siguen talando árboles y seguimos destruyendo la biodiversidad, en la que seguimos destruyendo el planeta y a gran parte de la humanidad con guerras y explotación por fines económicos. No quiero seguir promoviendo la desigualdad y la injusticia, el abuso al que estamos sometiendo a otras especies animales. Ni pensar que el cambio climático nos queda muy lejos.
Estos días vemos en los medios de comunicación algunas noticias sobre la recuperación de los peces en los canales de Venecia, los delfines en los puertos de Cagliari o el regreso de especies en vías de extinción a algunas costas. Y parece que todo esto fuera una consecuencia anecdótica de lo que nos sucede. Como un "anda, mira, qué bonito" que nada tiene que ver con nuestra forma de vida, con nuestra propia supervivencia. No quiero volver a la normalidad de playas colonizadas por sombrillas, canales turbios y puertos contaminados. Esto no es una anécdota, es sólo un reflejo de lo que nos pasa. Y lo que nos sucede es que no sólo podemos perder nuestra forma de vivir, sino que está en riesgo la vida de muchas personas, tal y como han estado alertando muchos científicos durante estos últimos años. 
Siento que no se habla de lo importante. No se trata de vencer al coronavirus, ni siquiera de cómo voy a sobrevivir este mes. Se trata de cuestionar nuestro modo de vida para poder seguir viviendo más allá de un mes, de un año o una década, y de que nuestros hijos, hijas y aquellos que están por venir también puedan hacerlo. Y, para ello, lo que debería de estar encima de la mesa es que no podemos seguir consumiendo de esta forma.
No podemos seguir devastando los bosques para plantar cereales que dan de comer a los animales de los que nos alimentamos; ni explotándolos en granjas en condiciones de extrema insalubridad que aumentan los riesgos de causar enfermedades; ni sacrificarlos en espacios de tiempo cada vez más cortos que provocan que los virus necesiten aumentar su agresividad y la velocidad de transmisión para continuar con sus ciclos vitales; ni contribuyendo a mercados negros de especies exóticas sólo por el capricho de tener en casa un raro animalito que decora muy bien mi habitación, y cuya presencia no hace más que acercarnos (a nosotros y a nuestros animales) a enfermedades de las que ni habíamos oído hablar y que ahora amenazan con romper de un plumazo todo lo construido; ni utilizando cada día transportes que, a causa de quemar combustibles fósiles, lanzan al aire agentes contaminantes que son los perfectos vehículos de propagación de agentes patógenos por todo el mundo; a seguir plastificando el mar y nuestros acuíferos, plásticos que terminan degradándose y formando parte de la sal que condimenta nuestras comidas o del agua mineral embotellada que bebemos porque la del grifo no nos parece suficientemente fiable...
Porque el coronavirus pasará, más tarde o más temprano. Y no se trata de ser catastrofista, los hechos acontecidos no nos permiten seguir negando las evidencias, que a estas alturas ya parece que se quedaron cortas. Todo apunta a que vendrán nuevas pandemias, a que el calentamiento global ya está aquí y no estamos haciendo nada para amortiguar su efecto imparable. Y seguimos sin hablar de lo importante: ¿qué vamos a hacer para NO volver a la normalidad? ¿Qué vamos a cambiar para garantizar nuestra supervivencia y evitar el sufrimiento de tantas personas?
Sé que esta crisis va a traer unas consecuencias nefastas, sobre todo para los más vulnerables. Y sé que es difícil pensar en todo esto cuando estás afectado por un ERTE o corres el riesgo de tener que cerrar tu empresa familiar. Y mucho más aún si has perdido a alguien y no has podido despedirte, o tienes a alguien a quien quieres enfermo y completamente aislado en el hospital o en un pabellón de un recinto ferial. Sé que es difícil imaginar una normalidad que no sea de la que venimos. Pero habrá que ser creativos. Porque lo que no hemos entendido es que no vamos a volver a "lo de antes", porque cuando podamos salir, tendremos heridas. Algunos habrán perdido a sus seres queridos, otros sus empleos y otros sufrirán aún más precariedad y recortes en sus libertades con la promesa de mantener nuestro "ideal" estilo de vida. Un estilo de vida que, por supuesto, es mejor que en otros lugares del planeta.
Desde luego, y lo es no porque aquí seamos mejores o tengamos más suerte, sino porque nuestro estilo de vida depende en gran medida de su precariedad y de su pobreza. ¿O pensamos que nuestros móviles, nuestra ropa, nuestros coches, nuestras verdura. costarían lo mismo si quienes las producen vivieran en las mismas condiciones que nosotros? Podemos seguir mirando para otro lado, como lo hemos hecho hasta ahora, podemos seguir queriendo "volver a la normalidad", pensar que la Covid-19 es una pequeña anomalía en nuestro camino. Lo que no hemos comprendido es que eso ya no es posible. De esta forma, lo único que conseguiremos es alargar el desastre, posponiendo un sufrimiento que nos va a ir llegando a cuenta gotas y que, al igual que en el experimento de la rana escaldada, cuando nos queramos dar cuenta, ya no habrá marcha atrás.
Por eso, me gustaría que no volviéramos a la normalidad, que no cayéramos en el fatalismo de que no se puede hacer nada, de que ya está todo decidido. Puede que así sea, pero me resisto a ello. Y una vida distinta, una vida que garantice nuestra supervivencia de verdad, que ponga por delante el bienestar de las personas y el cuidado mutuo a la acumulación de capital, que apueste por la Naturaleza y no la destrucción de ésta, no tiene por qué ser peor que la normalidad que vivíamos antes del confinamiento. Quiero salir de casa, no voy a negarlo, como todo el mundo, y ver al resto de mi familia y a mis amigos, pero no quiero que el coste de mi libertad, de todas nuestras libertades, se salden con una condena mucho mayor a corto o medio plazo. Tendrán que cambiar muchas cosas, eso sí: nuestra relación con el medio ambiente, con el consumo, con las comunicaciones... Y quizás tengamos miedo, pero espero y deseo no volver a la normalidad.

miércoles, 15 de abril de 2020

Ayuda a nuestros ganaderos. Consume cordero nacional.



Como consecuencia de la actual crisis del Coronavirus, los ganaderos de ovino están sufriendo serias consecuencias para poder comercializar sus corderos. La mejor razón para poder apoyar a todos los ganaderos de nuestro país, es consumir cordero, vacas y cerdo de origen nacional.

Contribuyendo de forma natural a preservar el medio ambiente limpiando de forma natural los materiales fosiles para que el monte no se queme y rural para preservarlo del abandono.

CONSUME PRODUCTOS NACIONALES 






martes, 14 de abril de 2020

'Llevo confinado mucho tiempo antes de que lo dijera el Gobierno' Iker Jimenez - 4 Milenio.



Iker Jiménez y Carmen Porter llevan encerrados en su casa desde el 9 de marzo, casi una semana antes de que se decretara el Estado de Alarma. La pareja de periodistas, que no tiene que salir a trabajar dado que Mediaset ha suspendido ‘Cuarto milenio’, ha compartido con sus seguidores cómo están combatiendo al coronavirus. “Hemos hecho varios programas monográficos sobre el coronavirus porque desde el principio nos lo tomamos bastante en serio”, ha explicado Porter en uno de sus videoblogs para YouTube. “Nosotros como informadores lo único que hemos hecho es transmitir la información, no callarnos con la información que nos estaba llegando. No alarmar, pero sí que estuvierais preparados”, ha explicado la periodista. "Hemos recibido muchas críticas por parte de muchos compañeros, y ahora son los primeros en fustigarse", ha vuelto a defenderse Porter. Entre las medidas que han tomado para combatir a la enfermedad, se encuentra no acudir ni siquiera a la compra: "No hemos salido ni al supermercado ni a la farmacia, porque compramos de todo. Hicimos una compra grande, grande para tener comida para un tiempo, tal y como dijimos en el programa”. "Las verduras, el pescado y la carne, nos las traen", admite la copresentadora del espacio de Cuatro, que añade: "Cuanto más vayáis al supermercado, más posibilidades tenéis de contagiaros". Entre otras dudas de sus seguidores está qué hacen con sus mascotas, a lo que responde: "Los perros son pequeños y tiene jardín", por lo que tampoco están saliendo a pasearlos.









domingo, 12 de abril de 2020

EN MEMORIA DE LOS QUE YA NO ESTAN. Santaflow Norykko Aitor - AÚN HAY LUZ (Himno de España: agradecimiento)



Esto no es un alegato político ni ideológico sino un gesto de agradecimiento a los que han estado y siguen estando al pie del cañón por el bien de todos. También es un recordatorio para las víctimas del coronavirus y un pésame a todas las familias de los que nos han dejado. España está de luto.
Gracias a todos los colaboradores por su esfuerzo desinteresado: amigos, familia, personas públicas y anónimas:
Mage, Olalla y Vega, Ana, Paco Nache, Jéssica, Pascu, Ana, Amalia y Mara, Paqui, Psychoblog, El teatro de Will, Mario Luna, Dyem, Jesús Pellejero, Eva María, Samantha Vallejo - Nágera, Cristina, Dani, Miguel Manzo, Verónica, Ángela, Quinto Muñoz, Bertrand y familia, Experto en igualdad, Angel, Libertad y lo que surja, Un señor de Logroño, David Santos, Rapazzoul, Soul Jony, Maria Teresa, Rob Trainer, N-Kaese, Roma Gallardo, Nora, El Rumañol, Adriana y Nairobi, Jose Manuel, Inmatrix, Baroc Solla, Desi, Santi, David, Guitarraviva, Sebas, Bruno, Javier Rubio, Stiff Sullivan, Mary Marikillah, Kessler, Gran Tercio, Sofía Rincón, Kako M, Mister D Bunker, Valentina Ortiz, Maricón de España, Los Meconios, Viktor, Remember Beats, Moldy, Silvia, Pablo, Isaac Parejo, Lady Blue, Lady Crocs, Alienada, Jose Luis Sariego, Carlos González, Grilex, Daniel, Marta, Luis y Andrés, Christian Sergio y Raquel.
Gracias también el Ayto. de San Sebastián de los Reyes por las imágenes cedidas del Hospital Infanta Sofía, la Policía y los servicios de limpieza. No nos olvidamos de nuestros mayores, los más vulnerables, que levantaron este gran país con su esfuerzo y para nosotros. Ahora y más que nunca: VIVA ESPAÑA Letra voces y coros: Aitor, Norykko y Santaflow Melodía principal basada en la marcha de los granaderos escrita para pífano y tambor de 1761. Re-armonizada y arreglada por Santaflow.
Bajo, quitarras, teclados, sintes, percusiones y efectos: Santaflow



viernes, 10 de abril de 2020

RESISTIRE - Baron Rojo.


La ca nción del Duo dinamico se ha convertido en el nuevo himno de la lucha contra el Coronavirus, sus autores han cedido los derechos de la canción para que se utilice contra la lucha hacia esta terrible pandemia. Cuando escuches este titulo de Resistiré recordaras a este mítico grupo rockero como fue Baron Rojo.

Tanto es así que he querido que todos la escuchéis y si alguien puede editar la canción con las imágenes y audios de esta pandemia quedaría perfecta.

En fin, os dejo con el vídeo, que aunque antiguo no os dejara indiferente.



Criminales disfrazados,
Seres sin razón ni piedad
No hay palabras en el mundo
Que definan vuestra maldad.
Por dinero asesinais
Por placer aniquilais
Por poder nos destruís
Súciamente mentís
Aunque siempre vigileis
Y mis datos proceseis
No es tan fácil hacerme callar.
Resistiré,
Resistiré hasta el fin
Resistiré,
Resistiré hasta el fin.
Ordenáis a los profetas
Que hablen de la guerra mundial
Lleváis siglos maquinando
El final de la humanidad
Y queréis hacer creer
Que os importa nuestro bien
Pero oculta en el disfraz
Hay un arma mortal.
Nos habláis de sumisión
Nos pedís resignación
Pero no me dejaré engañar.
Resistiré,
Resistiré hasta el fin
Resistiré,
Resistiré hasta el fin.
Yo maldigo

miércoles, 8 de abril de 2020

POESIA DEL ABUELO de Concha Gómez Santos.




Dedicado a todas las personas mayores que han fallecido y están sufriendo en sus carnes el confinamiento por el Coronovirus. 


Voy a decir para ustedes
con cariño y humildad
una corta poesía
que no es cuento sino verdad

Recuerdo, siendo pequeña,
que a profesores y mayores
teníamos gran respeto
sin tener tantos placeres.

Entonces era sagrado no
Contestar a los mayores
que con mucha educación
cumplíamos con mil amores.

Fuimos muy poco al colegio,
hay que decir la verdad,
pero si nos enseñaron
lo que hay que respetar.

Ahora estudian muchos años
y tienen mucha cultura,
pero tocante al respeto
no hay ninguna asignatura.

Y deberían tenerla,
sepan lo los profesores,
que bien merecen un suspenso
quien contesta a los mayores.

Los hijos deben ser hijos
 aun sobrados de sapiencia
los padres deber ser padres
por muchos años que tengan.

No hay cosa para los padres
que cause mayor placer
que le respeten los hijos
por muy crecidos que estén.

Y es triste y doloroso
y más que nada inhumano
el no encontrar cariño
Al llegar a ser anciano.

Los nietos a los abuelos
los quieren cuando son niños
pero según van creciendo
se va mermando el cariño.

Y si el abuelo les reprende
le contestan enfadados
tu ya no entiendes ni papa
Porque estas muy anticuado.

Cabizbajo y dolorido
se queda solo el abuelo
llorando con amargura
sin tener ningún consuelo.

Por la mañana temprano
dicen muy fuerte y sin duelo
no hay quien duerma en esta casa
por las toses del abuelo.

A muchos les pasa
todo lo que estoy diciendo
que Dios tenga en cuenta
lo mucho que están sufriendo.

Y me despido de ustedes
con las lágrimas en la vista
y os doy un fuerte abrazo
a todos los pensionistas.

CONCHA GOMEZ SANTOS
Esposa de Emilio Alvarez Rey.