Huele a sol y mar aunque estemos en el camino que traza el invierno. Huele a las paredes de la montaña que dejan su brillo en los dedos y extiende su fe por la gélida herida de las vías Quien me iba a decir a mi que este fin de semana aparecería por allí y mostrarían ese nuevo poder del que resiste las adversidades.
El sector temblaba ante tanto escalador que luchaba subiendo, creyentes en la doctrina de la escalada bella de cada uno de los que yo vi por allí quienes suelen dejar buenos momentos en cada vía.
A veces las condiciones son un jarabe que debilita los músculos y otras se convierten en acicate. Llegar arriba de la vía no es solo una forma de avanzar, sino también de mandar un mensaje a los que lo deciden todo, a los que pueden meterte en un pozo de angustia. Que estamos aquí que no nos merecemos vivir en la incertidumbre, que no es justo que las promesas sean las briznas de junco que se lleva el viento. Como Katalina me comenta siempre (las promesas como las apuestas hay que cumplirlas)
Todo el que estuvo aquí se añadió un mensaje a si mismo. Los escaladores se ilusionan cuando terminan la vía y si de paso logran progresar y subir de nivel, la ilusión parecerá fluir como el agua de un rió que baja gozoso hacia el mar. En un templo de escalada, como es en Gandia, el escalador se sintió como un rey al que entregan un cetro. Allí en aquella ensenada de batalla, los escaladores cayeron muchas veces y a algunos le degollaron los sueños.
Pero los escaladores con el corazón ardiendo y la esperanza libre y la ilusión indemne, triunfaron. ¿Por qué no soñar?. Huele a mar. El calor de Gandia llego hasta aquí. La luz de Gandia avanzó lenta hasta llegar a las frías paredes de la Marchuquera.
En fin, cuando ves estos vídeos te das cuenta de la verdadera actitud que demuestran los escaladores al intentar subir una y otra vez por unas paredes que se te resisten y la dificultad que entraña las mismas. Difícil y complicado cuando empiezas a practicar un deporte nuevo como es mi caso. Así que cuando veáis este vídeo entenderéis lo duro que puede llegar a ser este deporte, pero cuando subes sin asegurar todavía mas peligroso. La parte mental, supongo la mas importante.
Intentare comentar como fue este fin de semana en Gandia. Ahora, me falta tiempo para poder escribir y últimamente me es imposible poder dejar algún post, y acabarlo sin dejar resquicio alguno antes de que se me olvide algo, sobre cualquier anécdota o los nombres de algunos de los compañeros que allí conocí.
La ultima salida fue en la zona de Dos Aguas, el 16 de diciembre. Un barranco que no se puedo equipar, pero que se hará cuando se pueda y hacer la topo de otro que esta equipado pero no se conoce.
Cuando llegamos el sábado por la mañana lo primero que hicimos fue dejar los trastos y dirigirnos a las vías que desde la misma carretera ya se veían. Katalina ya había quedado con compañeros/as.
Algunos de los compañeros con los que quedamos aqui.
Quedamos con David (Bananas) en el rocodromo de Loriguilla y de aquí nos dirigiríamos a Gandia, donde nos juntaríamos con mas gente. Cuando llegamos desde la carretera ya se veían todas las vías repletas de escaladores.
Parte de las vías ya estaban estaba ocupadas. David (Bananas) aseguraba a Maribel, Helios al fondo a la derecha asegurando tambien, JJ y Ana.
Maribel asegurada por David.
Las vías eran desde quintos hasta octavos. Katalina, Ana, Helios, Javi de (EsKalar.com), y otros compañeros de los que no recuerdo el nombre. De Helios, David (Bananas), Katalina, Ana ya hable en la anterior salida, sin embargo conocí a Javi (Eskalar.com), que mas adelante pondré un vídeo suyo subiendo una vía de 7c+.
Todos actuaban con precisión de buenos cirujanos. Efectivos, sin alardes. Las abrían, las operaban y las cerraban. No prestaban atención al hecho de que los puntos de sutura quedaran mejor o peor colocados. La estética para los gurùs. Ese tipo de estética al menos. La que solo sirve para tirarse al pisto. Cuando las vías quisieron darse cuenta, habían pasado por el quiròfano de cada uno de ellos. Anestesiadas, sin enterarse de nada. Cuando acabaron estas estaban liquidadas. Y algunas no eran vías cualquiera.
Lo poco que yo hice había pasado de salida, y aunque lo intente en algunas de ellas, quedaron constancia de que los colmillos que exhibí se habían quedado en alguna. Se puede decir que me lo tome con cierta calma. Cuando acabamos sobre las 6 de la tarde nos recogimos y nos fuimos a tomar unas cervezas a Gandia. David y Maribel, Helios y otros compañeros se volvían a Valencia.
Helios en una de las vías.
Suelo dormir pocas veces en la tienda de campaña, antes solía conciliar el sueño bien, ahora me cuesta mucho mas. Sinceramente no tuve una buena noche, levantarme y pensar como seria el día, describiendo como subiría las vías, desde múltiples ángulos, no es lo que yo diría un día de relax. Luego, después de varias semanas, tocaba escribirlo en el blog y pensé que en la vida, como en el barranquismo, la escalada, etc....todo es según el color del cristal con que se mire. Lo dijo Ramon de Campoamor en uno de sus versos.
Y agregaba el poeta que nada hay verdad ni mentira. No es cierto que tocaba volver sobre nuestros pasos y volver a plantarle cara a las vías. No se me complicaron excepto la ultima (ya por cansancio), eso sin duda. Es cierto que me falta mucha entrenamiento, que hay que utilizar todo lo que se pueda las piernas y no agotarse intentando subir a pulso. Pero el mayor desacierto siempre son las prisas. Esas hay que dejarlas para los choris y los malos toreros.
En la escalada hay que recalcar también la importancia de leer bien los pasos. Es cierto, que fueron dos días intensos. Pero todo tiene su origen en la moral. Entiéndase esta como brío energía o fuerza. Pero la fatiga no es la causa, pues Katalina, Ana y JJ a los que estuve observando cuando subían tenían calidad y no la pondré nunca en duda. Pues no hay que correr. Fueron dos días de aprender, pero solo al final del año se sabrá si habrá castigo o premio, no antes. Mientras tanto, todo dependerá del color con que se mire.
En esta ocasión nos acompañaría JJ a unas vías fáciles, el con mas nivel nos las abriría.
JJ.
Os dejare un vídeo de el.
Un buen rato estuvimos aquí Pasadas unas horas nos dirigimos a donde la mayoría de compañeros estaban.
Aquí conocería a Javi. (Eskalar.com). Impresionante son las palabras adecuadas para describir como subía. En los videos y fotos se describe mucho mejor.
Y un ultimo vídeo de otro compañero.
Están son las vías de los vídeos, los desplomes eran acojonantes.
Helio asegurando a un compañero.
Estas ultimas fotos son de Javi.
En fin, acabo la crónica de esta salida. Fue un fin de semana de puente excepcional, disfrute de la actividad y de los compañeros que conocí.
Pero especialmente de estar contigo Katalina.
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